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LA OTRA HISTORIA DE TXANO GORRITXU TA OTSO MALTZURRA
Como en cualquier cuento, esta aventura de “Txano Gorritxu Ta Otso Maltzurra” comienza un lluvioso y gris día cualquiera, de los de hace mucho tiempo y que ya no abundan, aunque no demasiado lejano para los de buena memoria, situado en una década de profundos cambios culturales, “los 80”, y que se desarrolla en un pueblo industrial inmerso en pleno retroceso económico, que vio cómo las inquietudes de unos jóvenes les llevaron a encontrarse en Antzerki Eskola de Basauri.
Si estos acontecimientos tuvieran que tener unos protagonistas con nombre propio, serían los de los mozos Jordi Monedero y Alberto Oliveros, que desde el principio son ideario, impulso, catalizador e hilo conductor de una peripecia que dura ya más de treinta años y que sigue viva, siendo así como verdaderamente empieza esta historia.
Primera Fundación
Esos jóvenes, y primeros fundadores, se refugian de un país “gris”, en la escuela de teatro de Basauri, Antzerki Eskola, donde complementan su formación académica reglada con las clases y talleres de interpretación que se imparten en el viejo Teatro Social. Se divierten, rompen sus barreras, superan miedos, vencen su timidez, crecen, y juntos, empiezan a soñar.
Soñando, junto con otros intérpretes, establecen el grupo de teatro “Txano Gorritxu Ta Otso Maltzurra Antzerkia” y crean su primera obra d entretenimiento dirigida a los más pequeños, a la que titulan “3ºB”. Esta obra pasa a ser la primera de la Compañía amateur, y es representada en el desaparecido quiosco de la plaza del baile en las fiestas de 1987 y a la postre, esta actuación y esta preocupación de ser entretenimiento de los niños y niñas de Basauri, quedó fijada para siempre en el ADN de la cuadrilla, siendo esta representación desencadenante y precursora del desarrollo del “DÍA DEL TXIKI” en el calendario festivo de las fiestas patronales.
A la par, durante dos años, el grupo de teatro convive con la cuadrilla de fiestas con la que
comparte nombre y emblema, y que forman junto con otros amigos de diferentes ámbitos.
Durante estos dos años, participan en las fiestas, intervienen en diferentes eventos y concursos, y
así, poco a poco, sin darse cuenta, va creciendo en ellos la propia necesidad de aportar algo más al modelo festivo para dinamizar los “San Faustos”.
Es el miembro más joven de la cuadrilla, y cronista de esta historia, el que primero propone integrarse en “Herriko Taldeak”, asociación que aglutina al resto de cuadrillas que de modo oficial trabajan en el proceso de organización de las fiestas patronales.
La proposición no cala, asusta la pérdida de autonomía e integración en un grupo mayor, que a
priori, se encuentra muy alejado en su ideario festivo, pero esta propuesta va dejando un poso
que pronto desembocará en un nuevo proyecto.
De cómo una pintada llegó a ser nombre y definición de la cuadrilla.
Corría el año 1987, y en ese tiempo, los jóvenes, hijos del “baby boom” nacidos en la década de
los “60” y principios de los “70” llenaban las calles, los institutos, las manifestaciones, los conciertos, los festejos, o la vida en general, y expresaban de infinidad de maneras diferentes, anhelos convicciones, frustraciones y ansias de cambio en una sociedad en crisis y en plena desindustrialización. Las paredes de muchos lugares del pueblo eran tablón de expresión improvisada y rebelde de todas esas reivindicaciones y conflictos, pero entre todas las pintadas, para estos jóvenes intérpretes, sobresalía una sobre todas las demás; en una pared del Colegio Velázquez se veía y destacaba, “TXANO GORRITXU TA OTSO MALTZURRA EMAN BOTUA”.
Estos jóvenes, vieron, como un soplo de inspiración, una pintada que en su absurdo llenaba de color y contraste un ambiente, a veces muy enrarecido y crispado de conflictividad social.
Escudo Logotipo: Creación Consciente
Alberto Oliveros Aguado, formado en bellas artes, es quien se hace cargo del diseño del logotipo.
Dirigido en apariencia hacia el sector infantil, crea un emblema dotado de cierta ingenuidad, que dibujado con trazos de aparente sencillez, emula un dibujo pueril de una Caperucita sonriente, que con abrazo firme ahoga a un lobo dominado por el empoderamiento de una cándida niña que deja de ser tímida y desvalida.
Representa también la victoria sobre la maldad y tiranía que ejercen los fuertes y que se encarna en la figura del lobo subyugado a una feliz niña.
Segunda Fundación
En 1989 brota con fuerza el germen de la participación oficial en el entramado festivo, llegando la hora de dejar atrás los llamativos, coloridos y ciertamente horteras blusones de los trajes de fiestas de la cuadrilla, que eran la evidente expresión rebelde y contrapuesta a la mera tradicionalidad.
El grupo se abre a la participación, y a través del boca a boca se logra una gran adhesión; son muchas las personas que juntos desean establecer una nueva y diferente cuadrilla, que aportan toda su ilusión con la que comenzar esta nueva etapa.
Entre los numerosos grupos de amigos y amigas que se unen al proyecto de todas las partes de Basauri, es el barrio de Pozokoetxe y del Club de Tiempo Libre Iketza establecido allí, los que más miembros nuevos aportan, y de donde un mayor número de personas se suman a la renovada cuadrilla de fiestas.
La indumentaria
Se inicia un estudio previo y una reflexión inicial para confeccionar un nuevo vestuario que se
adapte a los requisitos y recomendaciones de la Asamblea de Cuadrillas pero sin perder el
espíritu rebelde y personal que representaban los disparatados blusones.
Inspirados en los trajes tradicionales, se adoptan muchos elementos provenientes de ellos,
siendo que el traje masculino es coincidente con muchos de los trajes festivos del mundo rural
peninsular y, el femenino, incorpora una característica capucha que homenajea de manera dual, tanto a las carboneras que en sus vestimentas comunes de trabajo se veían abocadas a utilizar
para cubrir cabeza y cuerpo, como a la Txano Gorritxu de los cuentos clásicos y hacia la que
inevitablemente éramos dirigidos por la imagen corporativa previa.
Esta indumentaria consta de estos dos conjuntos:
El primero, tradicionalmente femenino, se compone de falda de vuelo roja, corpiño del mismo tejido y color que la falda, cerrado con cordones negros y con capucha, delantal negro, camisa blanca, pololos blancos, saya blanca, medias blancas y abarcas.
El segundo, tradicionalmente masculino, se compone de pantalón negro, camisa blanca, chaleco negro, gerriko rojo, pañuelo al cuello
rojo, medias blancas y abarcas.
Ambos conjuntos portando el escudo/emblema/logotipo tradicional de la cuadrilla.
Es en los “San Faustos” de 1990 la primera vez que esta cuadrilla realiza la bajada de las fiestas
patronales y participa en la organización festiva oficial, superando el periodo de prueba y pasando a ser miembro de pleno derecho de la Asamblea de Cuadrillas “Herriko Taldeak”.
Son años productivos para una cuadrilla que, a pesar de no ser grande en número, ofrece vistosas, y a veces espectaculares, “bajadas” gracias a que los partícipes se afanan en brindar un espectáculo superando el mero desfile de bajada, y que se ve reconocido en algunos premios otorgados a la mejor de éstas.
Las aportaciones al entramado festivo de la cuadrilla son muchas, y esto es nuevamente agradecido, recibiendo uno de nuestros miembros, Juan Luis Galarza, la distinción de “Personaje más Jatorra” en 2007, Además, los hitos conseguidos so numerosos, como ostentar el récord de distancia recorrida por “La Eskarabillera” llegando volando con nuestros globos hasta Chequia en 1998.
Nuevamente, en 2017, Jordi Monedero, tras crear el espectáculo final de fiestas actual a mediados de los años “90”, tal y como lo conocemos hoy en día, trabajando año tras año en la guinda de una de las mejores fiestas populares que se pueden disfrutar, recibe también, la distinción de “Personaje más Jatorra”.
Tercera Fundación
El 10 de noviembre de 2018, la cuadrilla, en asamblea general, sigue reinventándose, y tras más
de treinta años de existencia con una gestión anárquica, libre y por aportación de voluntades,
mediante una nueva y necesaria reflexión, Txano Gorritxu Ta Otso Maltzurra se transforma en
Asociación Cultural, quedando plasmados en el preámbulo estatutario el espíritu y la historia que
siempre nos ha movido y define.
Preámbulo de los Estatutos de la Asociación Cultural Txano Gorritxu Ta Otso Maltzurra
En 1987, un grupo reducido de personas crean el grupo de teatro Txano Gorritxu ta Otso Maltzurra y la cuadrilla de fiestas del mismo nombre.
Estos primeros socios y socias fundadores, cuyos lazos se refuerzan en la Escuela de Teatro de
Basauri, “Antzerki Eskola”, dos años más tarde de su fundación detectan la necesidad de dinamizar, en mayor medida, los “San Faustos”, por lo que se decide abrir a otros colectivos e integrarse en “Herriko Taldeak” con objeto de ser un valor activo en la gestión social y cultural del calendario festivo del municipio de Basauri.
Es desde ese momento cuando se constituye esta Asociación con el actual vestuario, respetando el emblema-logotipo de su inicio, pero apartando los viejos blusones de origen.
Desde esa fecha hasta la actualidad (2018) la forma de gestión de la Asociación ha sido abierta a todos, sin jerarquías, asamblearia, colaborativa y por aportación de voluntades; sin obligaciones definidas.
Esta forma de gestión es también una característica que viene definiendo a la Asociación y es seña de identidad inquebrantable, siendo compartida mayoritariamente.
Las dificultades que en la actualidad acarrea el hecho de aún no estar constituida como Asociación de manera completamente legal y registrada, ha dado como consecuencia que, sin perder el espíritu de una gobernanza que resida plenamente en la asamblea de socios y socias, tengamos que constituirnos en una agrupación que recoja, de
manera estatutaria, obligaciones y derechos, pero siempre respetando esta asamblea como exponente máximo de la voluntad de la cuadrilla.
Como en cualquier cuento, éste pudiera tener un final feliz, pero es aún mucho mejor, porque prosigue sin terminar, ya que año tras año se añaden nuevas páginas a una historia que suma con alegría nuevos e interesantes capítulos que contar.
